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La relación entre la naturaleza y el ser humano ha cambiado a lo largo de la historia. La gestión medioambiental comenzó a considerarse seriamente a mediados del siglo XX.
Fue durante esta época cuando las presiones antropogénicas sobre el medio ambiente alcanzaron su punto álgido. Qué es la gestión medioambiental y cuáles son sus principios: esto es lo que se tratará en este artículo.
La esencia del concepto de gestión medioambiental
Este término tiene dos interpretaciones. Según la primera, la gestión medioambiental se entiende como un complejo de acciones para el uso de los recursos naturales con el fin de satisfacer las necesidades económicas, industriales, sanitarias y recreativas u otras del hombre.
La segunda interpretación define el concepto de gestión medioambiental como una disciplina científica. Es decir, es, de hecho, una ciencia teórica que estudia y evalúa el proceso de uso humano de los recursos naturales, así como el desarrollo de formas de optimizarlo.
Hoy en día, es habitual distinguir entre el uso racional e irracional de los recursos naturales. A continuación, hablaremos de ellos, centrándonos en el primer tipo. Para entender completamente qué es la gestión racional de la naturaleza, también es necesario comprender qué tipos de recursos naturales hay.
Clasificación de los recursos naturales
Los recursos naturales son aquellos objetos (o fenómenos) no creados por el ser humano, que éste utiliza para satisfacer una serie de necesidades. Se trata de minerales, suelos, flora y fauna, aguas superficiales, etc. Todos los recursos naturales pueden dividirse en las siguientes clases según la naturaleza de su uso por el hombre:
- Industrial
- Agrícola
- Científica
- Recreativo
- Terapéutico, etc.
También están divididos en dos grandes grupos:
- No agotables (por ejemplo, la energía solar, el agua);
- Agotables (petróleo, gas natural, etc.).
Estos últimos se dividen a su vez en recursos naturales renovables y no renovables. Cabe destacar que un recurso sólo puede asignarse a un determinado grupo de forma condicional. Incluso el sol no es eterno y puede apagarse en cualquier momento.
El uso racional de los recursos naturales estipula la protección y el uso competente de todo tipo de recursos y componentes naturales.
Historia de la gestión medioambiental
La relación en el sistema hombre-naturaleza no siempre ha sido la misma y ha cambiado con el tiempo. Se pueden distinguir cinco períodos (o hitos) durante los cuales se produjeron los cambios más importantes en este sistema de relaciones:
- Hace 30,000 años. Durante esta época, los humanos se adaptaron plenamente a su entorno mediante la caza, la pesca y la recolección.
- Hace unos 7,000 años es la etapa de la revolución agrícola. Es en esta época cuando el hombre comienza a pasar de la recolección y la caza a la labranza y la ganadería. Este periodo se caracteriza por los primeros intentos de transformar los paisajes.
- La Edad Media (siglos VIII-XVII). Es el periodo en el que aumenta la presión sobre el medio ambiente y nace la artesanía.
- Hace unos 300 años fue el comienzo de la revolución industrial en Gran Bretaña. La influencia del hombre sobre la naturaleza se multiplica y trata de adaptarla completamente a sus necesidades.
- La mitad del siglo XX es la etapa de la revolución científica y tecnológica. En este momento, la relación en el sistema hombre-naturaleza está cambiando cualitativa y dramáticamente, y todos los problemas ecológicos se están agudizando.
Gestión sostenible e insostenible de la naturaleza
¿Qué significa cada uno de estos conceptos y cuáles son sus diferencias fundamentales? Cabe destacar que el uso sostenible e insostenible de los recursos naturales son dos términos que están en lados opuestos. Se contradicen completamente.
El uso racional de los recursos naturales implica una forma de utilizar el entorno natural en la que la interacción en el sistema «hombre-naturaleza» se mantenga lo más armonizada posible. Las principales características de este tipo de relación son:
- Gestión económica intensiva
- Aplicación de los últimos logros y avances científicos
- Automatización de todos los procesos de producción
- Introducción de tecnologías de producción sin residuos
El uso racional de los recursos naturales, del que se dan ejemplos a continuación, es más característico de los países económicamente desarrollados del mundo.
A su vez, el uso insostenible de los recursos naturales se refiere al uso irracional, no sistemático y depredador de la parte del potencial de los recursos naturales que es más accesible. Este comportamiento conduce a un rápido agotamiento de los recursos naturales. Las principales características de este tipo de gestión de la naturaleza son:
- Falta de sistematicidad y exhaustividad en el desarrollo de un determinado recurso
- Grandes cantidades de residuos durante la producción
- Una amplia gestión
- Gran daño al medio ambiente
El uso insostenible de los recursos naturales es más común en Asia, América Latina y algunos países de Europa del Este.
Algunos ejemplos
Veamos algunos ejemplos de actividades que pueden utilizarse para describir la gestión medioambiental de ambos tipos:
- El reciclaje, la creación y la mejora de tecnologías sin residuos.
- Creación de reservas naturales, parques nacionales y reservas naturales en los que se aplique plenamente la protección de la flora y la fauna de la región (no de palabra, sino de hecho)
- Recuperación de territorios, que sufrieron la explotación industrial del subsuelo, creando paisajes culturales.
A su vez, podemos dar algunos de los ejemplos más llamativos de actitud irracional hacia la naturaleza. Por ejemplo:
- La tala irreflexiva de zonas forestales
- La caza furtiva, es decir, el exterminio de determinadas especies (raras) de animales y plantas
- El vertido de aguas residuales no tratadas y la contaminación deliberada del agua y el suelo por residuos industriales o domésticos
- La explotación destructiva y agresiva del subsuelo accesible, etc.
Principios de la gestión medioambiental
Desde hace décadas, los científicos y ecologistas desarrollan principios y condiciones que pueden ayudar a optimizar la relación entre el hombre y la naturaleza.
El uso racional de los recursos naturales consiste, ante todo, en una gestión eficiente que no provoque cambios profundos y significativos en el medio ambiente.
Al mismo tiempo, los recursos naturales se utilizan de la forma más completa y sistemática posible. Es posible distinguir los principios fundamentales de la gestión medioambiental:
- Consumo humano mínimo (llamado «nivel cero») de los recursos naturales.
- Correspondencia entre el volumen del potencial de recursos naturales y la carga antropogénica en el medio ambiente para una región determinada.
- Preservación de la integridad y el funcionamiento normal de los ecosistemas en el proceso de su uso productivo.
- Prioridad del factor ecológico sobre el beneficio económico a largo plazo (principio de desarrollo sostenible de la región).
- Armonización de los ciclos económicos con los naturales.
Formas de aplicar estos principios
¿Hay formas de aplicar estos principios? ¿Es posible resolver en la práctica todos los problemas de la gestión medioambiental? De hecho, existen formas y medios de aplicar los principios de gestión medioambiental. Pueden reducirse a las siguientes tesis:
- Estudio profundo y exhaustivo de las peculiaridades y todos los matices del desarrollo de los recursos naturales
- La colocación racional de empresas y complejos industriales en el territorio
- Desarrollo y aplicación de sistemas eficaces de gestión regional
- identificación de un conjunto de medidas de protección del medio ambiente para cada región
- Seguimiento y previsión de las consecuencias de las distintas actividades económicas
Correlación de conceptos de economía y ecología:
Estas dos nociones están estrechamente relacionadas. No en vano comparten la misma raíz, «oikos», que significa «casa, vivienda». Pero mucha gente sigue sin darse cuenta de que la naturaleza es nuestro hogar común y único.
Los conceptos de «ecología» y gestión medioambiental son prácticamente idénticos. Los llamados paradigmas de la gestión ecológica de la naturaleza pueden explicarlos de la manera más lúcida. Hay tres en total:
- Minimización del impacto humano sobre la naturaleza en el proceso de utilización de los recursos naturales.
- Utilización óptima (plena) de un determinado recurso.
- Maximizar los beneficios de un determinado recurso natural para mejorar el bienestar de la sociedad.
La gestión y la conservación del medio ambiente son conceptos que han adquirido una extraordinaria importancia en los albores del nuevo milenio. Por primera vez, la humanidad está pensando seriamente en las consecuencias de sus actividades y en el futuro de nuestro planeta.
Y es muy importante que no haya discrepancia entre los principios y declaraciones teóricas y la acción real. Para ello, todos deben ser conscientes de la importancia de un comportamiento medioambiental adecuado y sostenible.
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